ALQUIMIDES

VOS Y YO

Acercarnos, rozarnos suavemente, encender el fuego sin prisa y sin tregua.

Mi lengua dibujando deja estelas en tu espalda, y un rastro de saliva humedece esa piel tan reconocida, tu sabor aviva mis sentidos y me vuelvo un tigre que despliega sus garras.

La punta de tus dedos recorre el camino suavemente, se enciende el fuego y nuestros cuerpos se asoman a la voragine insaciable del deseo.

Somos sol y luna, dia y noche, mar y arena.

Soy el fuego incendiando tus entrañas, sos el agua calmando mis pesares.

 En el puerto de tu cuerpo, voy marcando huellas, en mis oidos se deslizan tus gemidos.

Alzamos vuelo a un mismo tiempo y somos uno y es nuestra carne un estallido.-