El Candelas con su faja y su cheira de efusión
Postrado sobre la encina espera la sopa hoy.
Los caracoles se guisan en la perola de hierro
La guindilla el tomate y pimentón raspinegro.
El Candelas y sus ganas se juntan en el ejido
El plateo de la luna entre sombras ha surgido.
Es el tiempo que la papa se fría con borboteo
En el humo re pringoso de sobras de revoleo.
El Candelas no avía, cocido, ni ollas de papas
El tiene a la farolona que guisa sabor de alma.
Los aúllos de las ascuas avivan calor de fuego
Es tiempo de disponer las papas de carretero.
El Candelas respingoso por sátiros del averno
No sabe gozar la maña de payos y pelo añejo.
El agua, sal y las artes del cacillo y escárcelos
Se prevé en la maña del cocer de las cazuelas.
El Candelas y su gente se visten de trigo seco
Coger a la luna blanca, la mies y segar el heno.
Oculto de olor a arrope es la faena del cuenco
Que sube con el gemir al edén de los ejemplos.
El Candelas con su cheira y su fajín de gitano
Dormido sobre el ejido se imagina soberano.
En los galanos del rio se exhibe la luz de luna
Brega la mula del carro en ejes de la fortuna.
El Candelas y su gente se viste de olor y ganas
Asadura con el agua, sin sal, sin grasa, ni nada.
Es la voz de los ejidos rizando espinas al cante
Las gachas y la fritada se juntan a sus dislates.
El Candelas con su geta y su arruga de ceniza
Delira comer un pote de cerdo de carne fina.
Es el tiempo del enigma de boca por el gastar
Con caracoles de guiso con sabores de rezar.
El Candelas con su porte y la faca de la parca
Dormita sobre el ejido con avidez de desgana,
Encuerda los borceguíes verdes de ova limón
Para que yante su boca un guisado de primor.
Esto es jácara de guisos de sales y luz de luna
Ejidos de sabor viejo en lares de Extremadura.
Autor:
Críspulo Cortés Cortés
El Hombre de la Rosa
2 de marzo del 2011