boris gold

UNA DE ARENA...OTRA DE CAL

Piensa que algún día

sus pasos lo lleven,

hasta un bello reino

que lo haga vibrar,

donde la nostalgia

lo estuviese esperando,

y le diga, viejo

tardaste... en llegar.

 

Tal vez ella misma

le cuente de cosas,

que a pesar del tiempo

nunca él olvidó,

entre ellos uno

que lleva muy dentro,

Silvina su nombre

tanto...que la amó.

 

La recuerda siempre

como a una princesa,

bucles en cascada

y risa angelical,

se tomó una nube

y lo dejó muy solo,

no podía creerlo

pero fue...algo real.

 

Recorrió un camino

muy lleno de baches,

ascendió a veces

y le tocó bajar,

eso es condimento

la sal de la vida,

pero hasta en la mala

le quedó...soñar.

 

Entonces en un sueño

decidió ir a verla,

un hada tan linda

y la vio tal cual,

pollerita a cuadros

con su blusa al viento,

y oyó en sus labios

su nombre...Oscar

 

Todo es muy lindo

hasta el cruel momento,

en que abrió los ojos

y vio todo igual,

pero siempre ha sido

así de este modo.

una es de arena

y otra...de cal.

 

Boris Gold