El silencio se hizo presente mientras la espera aumentaba
Desasiendo la poca paciencia que aun en ti quedaba,
Y en mi el miedo a decir lo que pensaba me paralizaba
Porque lo que se siente no siempre es lo que se piensa
¿O sí?
Se rompe el silencio después de tanta espera
Lo que hizo provocar entre los dos una guerra,
Y atacando sin temor con lastimosas e hirientes palabras
Acabamos los dos moribundos llenos de culpa y nostalgia.
Regresa de nuevo el silencio
Ahora acompañado de disculpas y lamentos,
Y mientras lloras te miro, tú dices: “lo siento”
Me miras yo te miento y digo: “necesito un tiempo”
. . .