Antes…era un cardo
Solitario en el desierto,
Estropeado por el viento
Y fatigado por el sol…
Pero un día, una dulce joven
Tropezó conmigo
Y una espina, hábilmente enterré en su piel
Zurrando la bandana
Un rasguño logré
Y como suele suceder
La muchacha arrobó mi ser.
Ella me ha sembrado ahora en su corazón
Llevando consigo mi espinoso y hostil amor
Pero ya somos dos…
… que vivimos el momento, el instante,
El presente…
Aunque todo parezca una efímera y fugaz ilusión
Pues nose que es lo que pasa!!
Pero te quiero mi amor.