La luna obstinada en el cielo
Irradiando destellos de plata
Y yo sin poder alzar vuelo
Para pintar un cielo escarlata
Anclado estoy, a este muelle
Queriendo ser libre cual pirata
Viviendo este día perenne
Escuchando una lenta serenata
Sin navío para surcar los mares
Sin alas para elevarme al cielo
Solo un lápiz para expresar mis pesares
Y un papel para volverlos eternos
Aunque la libertad me es innata
Insisto en encadenarme al puerto
Hasta que se extinga esta fogata
Mi vida enraizada a este suelo
Perdiéndome tantos paisajes
De naciones harto lejanas
Aventuras detrás del celaje
De la corriente vida mundana
Imaginando tantas historias
Viendo partir a las barcazas
De oportunidades transitorias
Que se van quemando en las brasas
Es mi escenario tragicómico
En el que he reído y he llorado
De mi libertad lo antagónico
Pero del que me he enamorado
En el que he cosechado amistades
Y en el que he encontrado al amor
En el que se ha engrandecido mi esencia
Y en el que he encontrado calor
Atado por los hilos invisibles
De las experiencias cotidianas
Que han dejado huellas intangibles
En lo más profundo del alma
Lo difícil no es aprender a volar
O conseguir ensamblar el navío
Lo difícil es, esos lazos, cortar
Y emprender el viaje al vacío
Por ello seguiré observando
A la luna desde este astillero
Al horizonte seguiré mirando
Creando un imaginario sendero
Viviendo en la mente aventuras
Creando ilusiones y sueños
Mientras admiro la gran bravura
De los tan inmensos océanos
Añorando vivir como el lobo
Que en el bosque solitario aúlla
Planeando todos los modos
En los que podría alcanzar a la luna
Deseando obtener soledad
Para volver realidad los mitos
Obtener la ansiada libertad
Y pintar un paisaje infinito.
Andrés Ruiz H.