!Que hermoso sería !
sí no hubieran trincheras,
sí no hubiera torturas,
sí no existieran las bombas ,
la traición y las barreras,
!Ay! !cómo me duele!
¡ Cuánta desolación ¡
cuanta hambre y
desnutrición ,
de esos infantes.
¿Dónde están los sueños?
¿La sonrisa de esos niños?
¿Dónde está el amor?
¿La compasión?
Los Derechos de Los Niños,
será que alguien los vio,
¿Los habrán leído?
Sólo veo inocentes
sin pan, ni agua ,
sin ropa ni padre,
sin horizonte.
Tampoco un puente.
Se han quedado
al otro lado ,
desamparadas ,
Sin nada.
Ni saben, nada,
sin rumbo.
Caritas de pena ,
caritas de luna ,
Sin esperanza ninguna.
Llora el niño,
solloza la niña ,
sin pan el niño, sin pan la niña .
Caritas de angustia,
caritas de luna,
la paz que no viene ,
ni un juguete tienen,
ni un cuento infantil .
Sus viditas hacen historia ,
la sonrisa se ha marchado,
solo el quebranto ha quedado,
hasta los sueños se los han robado,
de juegos no saben ,
solo de destrucción ,
jamás solas.
Pies que caminan sin rumbo,
manitas que suben al cielo,
ojitos llenos de lágrimas ,
mejillas sin besos ,
abrazos que no reciben.
¡Qué ansiedad
y pesar siento!
Por una carita de pena
tan redonda y sola
¡cómo la luna!.
Lluvia Tropical
SAO PAULO BRASIL
12 de octubre de 2004
Guisela Montoya