(esperar 38 segundos de la música para leer el poema)
Si observas en mi dentadura
encontrarás una marca fatal
la que comerá tu alma pura
hasta el cuerpo por acabar.
Mis dientes de ti son débiles
por conjuro de carne gestado
en tus finas curvas tan ágiles
dejándome en la voz helado.
Aflora verborragia demencial
en busca de emparentar amor
con dolor sobre faz angelical
en tu infierno dotado de sabor.
Huella dental en contracción
resiste la frialdad para tentar
colmillos en aullido de presión
aprobando tu joven suspirar.
Afiebrado éxtasis de canino
augura herida abierta bucal
adosando a la fémina destino
de soñar el desenfreno oral.
Hambre y sed de luz voraz
que la mordida te ofrendará
en un viaje de pasión veráz
donde tú, mujer, feliz serás.
Vito Angeli