El pintor plasma en el lienzo,
a través de colores y pinceles
la belleza de un atardecer,
la quietud o furia de la naturaleza,
lo hermoso de un paisaje . . . .
su senibilidad se lo permite.
Si el pintor pidiera, posaras para el
los colores existentes serian insuficientes
para plasmar, tu belleza . . . . .
tu sonrisa, alegría y nobleza.
Lo mas dificil . . . . . . . .
o imposible quizás para el seria,
plasmar tus ojos bonitos,
con esa mirada cautivadora
y la intensidad de su luz.