Corazón de Madre, con arrojo labrado
Hijos amados jamás desamparados
Vida por vida, de retoño cultivado
Lágrimas amargas por no vivir, pero dulces por el pasado
Corazón de amante, mujer de vaivenes
Hombres nefastos penetraron tus sienes
Partieron tu alma marcharon cuando vienes
Solo el reflejo doloroso del espejo tú tienes
Corazón de Amiga, soledad de consejos
Todo para ellos nada para tus huesos
Pensamientos alegres, recuerdos añejos
No temas, no temas, cuando miras a lo lejos.