Llevo, una LÁGRIMA marcada del CORAZÓN:
Que refleja del alma en mis tristes ojos, latidos ansiosos de olvido cada amanecer de despertar, viéndome solo sobre una cama, que corre ardientemente llena de nostalgias por el lado oculto del rostro, que tantas veces fue acariciado con loca pasión desbordada por tus suaves dedos, haciéndome soñar en tantas cosas posibles de lograr juntos, alcanzándolas con tiempo dedicado, de eternos enamorados por su historia escrita cada día glorioso vívidamente cumplido, cuerpo sobre cuerpo en un solo cuerpo amadamente sentido, bañados en completo sudor, dejando en el aire del cuarto su estela inequívoca por fragancia de amor, hasta el próximo encuentro intimo de ambos mundos...,
Sentida en los espacios vividos de soledad, como recuerdos que nunca más volverán hacer vida consentida por la piel desnuda al viento, sedienta de nuevos momentos por detalles sinceros de emociones, para seguir recordando el amor al mirarnos en silencio, tomándonos las manos por aquellas dos personas amables, que dándose un dulce beso de buenas noches se dormían plácidamente cobijándose lentamente en el calor seguro de los brazos del placer consumado en noches que parecían que jamás terminaban con el aparecer del día a la ventana...,
Desvelado sin compasión de misericordia por la mujer amada, recriminado por lo que nos faltó por vivir de nuestros sueños queridos de verse realizados hoy en los distantes brazos, sufriendo en verdad el castigo cautivo del placer por la carne, por quien la haya más añorado de tenerla en total libertad, sin reglas y condiciones que cumplir nunca como debió ser desde un principio hasta el fin de nuestras vidas juntas, amando con una sonrisa de blancas perlas y una hermosa flor sobre el pecho anhelado, la satisfacción sentida más no fingida del amor puro, en esta relación extinta.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 10032011 12:00 PM.