Ya huelo a incienso y palmas
en la calle el paso santo
montado en la borriquita
mientras suenan las saetas
con voz quebrada de llanto.
Cofrades con dolor en el alma
descalzos van en procesión
lacerandose las carnes
sufriendo apenas el dolor
esperando su perdón.
La noche grande en Sevilla
Macarena, Trianera,
el Gran Poder en procesión
hacen temblar mis palabras
mientras llora el corazón.
Dia de luto y silencio
el santo entierro salió
costaleros en alpargatas
portan en sus hombros llagados
a Jesus con su dolor.
Un domingo de alegria
el paso de resurreción
con jubilo sevillano
estrechamos nuestras manos
pronunciando una oración.
Ángel Reyes