Al pie del cañón plumafuente
contra la naturaleza domesticada del parque
y las mentes fosilizadas académicamente,
contra el zumbido doloroso del día a día
y la tibia mediocridad de los todopoderosos.
Es la pluma la dorada llave del alma,
piedra angular del albedrio,
universo de tangentes ecuaciones verbales
que hacen y deshacen el minuto.
En la calle las esposas hemisféricas
maniatan la sinapsis y adormecen las ideas,
como ovejas y gallinas entre parto y matadero.
Libertad À la Carte
como se extiende el Somos Libres
del salón de clase al impuesto /
del humano al ciudadano.
Es la pluma lluvia de jungla
que cual reloj despertador
reverdece al hombre
que en el pecho dormita.