Son tus bellas manos,
Las que me guían,
Las que cada mañana veía,
Las que cada despertar me acarician.
Recibo de ti
Tu amor glorioso,
Tu me das tu cuidado,
Grandioso y maravillosos,
Siempre estas a mi lado.
Quien a ti no te adora,
Mi mujer amorosa,
Mi niña encantadora,
Ángel hermosa.
Se que siempre me amaras,
Me darás tu cariño,
Hoy como siempre me besaras,
Feliz y sonriente.
Para mi no serás indiferente,
Vendrás hacia mí volando,
Vendrás a mí como los peces,
Llegando a mí en el prado.
“Vendrás como las estrellas, con delicias e ilusiones, vendrás siempre bella.”