la cara de el dolor y la deprecion , es la tristeza que invade tu cuerpo. que poco a poco se va metiendo por tus venas, y comiensas a sentir sus efectos . empiezas con la soledad porque te vas alejando, y apartando de todos. y empiesas a guardar distancias porque hubo desprecios maltratos descriminacion traiciones y humillacion te sientes solo. que nadie te comprende o entiende y que todo lo que haces esta mal. tus ojos no quieren ver la luz tus labios tiemblan tu lengua se pega a tu paladar,tu olfato todo lo huele mal y tus oídos desconoce los sonidos las manos te tiemblan tus rodillas se quebrantan y mas te alejas de aquellos que te pueden ayudar lloras en la soledad en un rinconcito tu vos kebrantada y te trabas al hablar sientes que ya todo esta perdido., que no vale la pena luchar. y sientes que como persona no vales nada. tu cuerpo se estremece como llegar a un trance en el cual no sientes nada y no te importa lo que pase los malos pensamientos invaden tu cuerpo mente corazon y tu pulso corre a mil por horas sientes que tu única salida es la muerte. y empiezas a darte por vencido.. los deseos de suicidio están latentes.. y sientes deseos de venganza destrucción y homicidio.. la confusion te invade y sientes que empiezas a perder el control y no hayas como dominar esas sensaciones. y es ahi cuando como un ser humano con sentimientos alma cuerpo y corazón debemos despertar y dejar que el ser interno de estar con vida y los deseos de vivir tienen que predominar con ímpetu fuerza valor coraje y reanudar la carrera que seamos como el águila que renueva su plumaje y su pico y apoyarnos en el ser todo poderoso Dios que nunca falla y buscar apoyo moral porque siempre hay una ayuda de donde menos lo esperamos y lograr derrotar al dolor y la deprecion y todas esas preubas y luchas para que se conviertan tan solo en sombras de el pasado y que sea como una escuela para nuestras vidas y podamos levantar el trofeo de el triunfo por la vida y busquemos la felicidad que tal vez por accidente o a propósito se nos fue negada y como humanos somos inperfectos pero como hijos de Dios SOMOS TRIUNFADORES