Se me murió el sueño
de nuestras noches,
se me escaparon las razones de tus
reproches.
Se me marchó volando,
este amor tuyo,
cansada y con lo puesto,
yo también huyo,de
este desamor,de
tanto orgullo.
Me dejaron mis musas,
por otro poeta,cansadas de
desenpolvar ya,mi libreta,
sin fuerzas para escribir,
ni cuatro letras.