Que perfume le nace que me hipnotiza.
Que provocadores labios aventureros
Que me llaman y magnetizan.
Dime tú que tienes
Dime de que te vistes para verme.
Que tiene tu magia
Que me atrapa para fascinarme.
Ven hasta mi sitio hoy
Que te espero para amarte
No hables cuando llegues
Que quiero oír la luna cantarte.
Entrégate al amor de mi carne
Más no prometas permanencia,
Solo calma tu sed de mí
Que yo calmare su insistencia.
Vete tranquilo por tu camino
Seguiré aquí en el mío
Guardare de aquel instante
Tus ojos verdes mirando los míos.