Soy una sombra errante
siempre vagabunda,
sin dejar pisadas
me pierdo entre la bruma.
Extraviada la mirada
con los ojos en la nada,
el viento me arrebata
de un soplo el sentimiento
que se va dando tumbos
rompiendo los cimientos
de un amor profundo
que en torbellino
se lo llevó el viento.
A dónde fué el amor
que dejó desolación
y una soledad que delira
en la melancolía
y un corazón
que yace en la amargura
dando tumbos...
Su sangre derramada
en las paredes del alma,
filtrándose lentamente
por las grietas del olvido.
Allí no hay camino,
sólo una frialdad
que paraliza los sentidos
y un abismo tan profundo
que parece no tener fondo...
Allí es, donde se aposenta la locura
y en las lobregueces
se pierde la cordura...
para languidecer en ese socavón
en donde zozobra la razón
y en donde el eco golpea fuertemente
taladrando la débil mente,
repitiendo una y otra vez
con una voz estridente...
¡Estás demente...estás demente!
Felina
DEMENCIA