Árboles risueños tras la ventana de luz,
que lanzan al aire a dar sonrisas al tiempo.
y las rocas inmóviles con su gusto sereno,
albergan los cuentos que van hasta la tumba.
Los colores se lanzan a su natura aventura
para los sentidos alegrar y mentes inspirar.
Las musicales notas las aves vienen a aportar
a veces de vida, a veces de muerte; pero siempre un cantar.
Las nubes con su fecunda arte creadora,
trazan los sueños y elefantes perdidos.
Muerden las montañas y a la estrella cantora,
además crean cirios y una paz consoladora.
La luna, imperiosa amante y soñadora
que hace del viento fiel esclavo furtivo,
realiza la danza arrítmica y sin motivo;
movida por razones y cuestiones del sentido.
Mucho tiempo dedica el tiempo ha cuestiones solitas,
solicita el tiempo cuestiones triviales,
escribir es bonito cuando no hay primaverales,
escribir es bonito cuando es tiempo de los iguales.