El aficionado a la literatura que, en algún momento de su vida, decide fijar su atención en la saga que el escritor británico C.S. Lewis dio a conocer hace varias décadas bajo el nombre de «Las crónicas de Narnia» difícilmente olvide completar la lectura de esta colección que ha logrado cautivar tanto desde los libros como de la pantalla grande a niños, jóvenes y adultos de distintas partes del mundo.
El desembarco en el fantástico universo narniano se produce siempre por medio de «El león, la bruja y el ropero», la primera entrega de esta serie que también incluye a propuestas como «El príncipe Caspian», «La travesía del viajero del alba», «La silla de plata» y «El caballo y el muchacho», muchas de las cuales ya han inspirado la creación de una película.
Quienes hayan seleccionado a esta saga para entretenerse durante sus ratos libres y deseen conocer un adelanto del contenido de aquellos volúmenes que aún no hayan disfrutado, no dejen de leer los párrafos siguientes porque en ellos habrá información sobre «El caballo y el muchacho».
Este relato, que surgió en 1954 y constituye el quinto volumen de la colección, invita al lector a descubrir una historia repleta de aventuras en la cual los protagonistas son un niño y un caballo que logran establecer un gran vínculo de amistad e iniciar una fascinante travesía durante el reinado en Narnia de los hermanos Pevensie.
En «El caballo y el muchacho», como se desprende de la lectura de la obra, la acción no tiene como único escenario a Narnia, sino que hace foco en Calormen, un ficticio imperio que se localiza al sur del reino de Archeland.
Si les resulta atrapante la propuesta de «Las crónicas de Narnia» y les interesa conocer por completo el contenido del libro que se publicó algunos meses antes del lanzamiento de «El sobrino del mago», no duden en adquirir un ejemplar de «El caballo y el muchacho».
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