Carta a una señorita en París de Julio Cortázar

A diferencia de otras ocasiones, esta vez no describiremos el contenido de «Bestiario», sino que mencionaremos ese título que tanta trascendencia ha tenido a través del tiempo sólo para informar en qué libro pueden encontrar el cuento que presentaremos en esta oportunidad: «Carta a una señorita en París».

Este relato, uno de los tantos que el escritor argentino Julio Cortázar escribió con gran creatividad y talento, aparece publicado en «Bestiario» justo cuando la historia de «Casa tomada» llega a su fin.

Por medio de un texto presentado en forma de carta, el autor convierte al lector en testigo del accionar de un hombre que, tras mudarse a una casa ubicada en Buenos Aires, sobre la calle Suipacha, y desordenar el lugar, decide enviarle un escrito a la dueña de la vivienda (que se encuentra de viaje en París) para explicarle lo sucedido y hacerle llegar las disculpas correspondientes.

Lejos de ser un problema de fácil solución, el motivo que generó un importante caos en ese hogar es tan extraño como tierno y asombroso: la aparición de numerosos conejos que brotan de la boca del inquilino.

Al principio, la llegada de estos animales es controlada por el responsable de semejante situación pero, con el tiempo, la propagación y el crecimiento de los conejos se vuelven incontrolables: no sólo son cada vez más, sino que estas pequeñas criaturas comienzan a destruir todo lo que encuentran a su paso, desde libros hasta las cortinas.

Ante semejante panorama, el protagonista sufre una profunda desesperación y, al no hallar una solución rápida y efectiva al problema, toma la decisión de matar a los conejos y suicidarse.

Quienes se sientan atraídos por la pluma de Julio Cortázar, aman las propuestas literarias de fuerte contenido fantástico o, simplemente, experimentan curiosidad por saber cómo un hombre puede llegar a vomitar conejitos, no deberían dejar de leer el contenido de «Carta a una señorita en París».