Hoy, a través de este artículo, nos iremos hacia el pasado para recordar una obra que, por sus características, logró sobresalir entre todas las propuestas literarias que dio a conocer, a lo largo de su vida, el novelista, dramaturgo y cronista español Benito Pérez Galdós.
Como se puede advertir al iniciar la lectura de este texto, el material que impulsa estas líneas es «Doña Perfecta», una novela de perfil social lanzada en 1876 cuya trama se desarrolla en la España del siglo XIX.
Varios años después de haber sido publicada, la historia fue llevada a la gran pantalla en diversas ocasiones pero, por si no han visto esas versiones, no las recuerdan o, directamente, no conocen el argumento, a continuación contaremos de qué se trata este libro que ha dado tanto que hablar.
«Doña Perfecta» es una creación muy irónica pero, a la vez, muy realista que le permitió a Benito Pérez Galdós retratar los problemas sociales que se podían detectar en la segunda mitad del siglo XIX.
Para evitar acusaciones y descripciones directas, el autor inventó una ciudad y la presentó como un sitio carente de riqueza cultural y poco floreciente en materia económica donde todo parece girar en torno a las tertulias y la tradicional moral de sus habitantes.
En ella, producto de esas normas vigentes, existe una gran hipocresía pero, en definitiva, ni «Doña Perfecta» está libre de defectos ni «Don Inocencio», otro de los personajes de esta historia, es tan ingenuo como su nombre parece afirmar.
Con este interesante relato en el que también tienen importancia las figuras del joven ingeniero Pepe Rey y su prima Rosarito, Galdós ha logrado dejar al descubierto la posición progresista y europeizante de unos y la falta de reacción de una sociedad marcada por creencias y formas de vida tradicionales.
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