Aunque, en los últimos tiempos, la figura del escritor peruano Mario Vargas Llosa ha trascendido a nivel internacional no por sus aptitudes literarias sino por sus polémicas declaraciones, no se puede dejar de reconocer que este novelista nacido en Arequipa el 28 de marzo de 1936 tiene talento para la escritura.
Más allá de que a Vargas Llosa le guste jugar con el escándalo (como recordarán, su calificativo de «dinosaurio» hacia Hugo Chávez no pasó desapercibido por nadie), sería injusto e inapropiado hacer que sus pensamientos o acciones provocadoras opaquen todo lo que ha logrado a partir de sus contribuciones hacia la literatura de su país.
Demás está decir que este peruano no es un escritor improvisado, pero para demostrar que su labor literaria data de varias décadas atrás, hoy Poemas del Alma hará referencia a «El desafío», un material publicado en 1957.
En ese relato que surgió mucho antes del lanzamiento de obras como «La fiesta del chivo» y «Travesuras de la niña mala», el también creador de «Conversación en La Catedral» plasma una admirable descripción de un duelo que se lleva a cabo con navajas.
Además de retratar con exactitud el escenario y el desarrollo del enfrentamiento entre dos hombres, el escritor incluye referencias importantes sobre todos los personajes y, para el final de la obra, reserva un dato fundamental que permite entender por qué, en ese marco violento, se podía encontrar a un anciano como espectador.
Si tienen curiosidad por saber cuáles y cómo han sido los primeros pasos de Mario Vargas Llosa en el mundo de las letras, no dejen de conseguir una copia de «El desafío», un texto de pocas pero intensas líneas que sorprenderá a más de un amante de la literatura. Por este material, en 1958 el novelista fue distinguido con el premio otorgado por la Revue Française.
Comentarios1
Admirable y recocnido escritor peruano que honra las letras de su país.
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