Resumen de El conquistador

Desde que comenzó a dar a conocer sus obras, el argentino Federico Andahazi se convirtió en una figura importante del ámbito literario. Aunque muchos lo han criticado, no se puede dejar de reconocer que sus libros no pasan desapercibidos: al creador del ya presentado «El Anatomista» se lo admira o se lo rechaza, sin términos medios.

En esta oportunidad, Poemas del Alma vuelve a centrar la información en la figura de este novelista ya que «El conquistador» es otro de los títulos de su autoría que merece ser tenido en cuenta.

En este relato que le permitió, en 2006, obtener el Premio Planeta de Novela, Andahazi sitúa la acción en el imperio azteca del antiguo México. En ese contexto, aparece un pequeño a punto de morir ya que su vida ha sido ofrendada al dios de la guerra.

Cuando su destino fatal parecía estar escrito, un anciano integrante del Consejo de los Sabios se anima a defenderlo por estar en contra de los sacrificios y así consigue salvarlo, a cambio de hacerse cargo de su crianza.

Con el tiempo, Quetza, el niño protegido, se convierte en un brillante joven. Él será quien, guiado por las profecías del calendario azteca, consiga descubrir Europa, un mundo hasta ese entonces desconocido. En ese continente, el muchacho encuentra una cultura distinta, gobernantes ambiciosos y hombres cegados por la riqueza y el poder capaces de conquistar otras tierras para extender sus dominios. Frente a esa realidad y con el objetivo de evitar el exterminio de su pueblo, Quetza resuelve idear un plan para impedir la conquista.

Como resulta evidente, «El conquistador» posee un argumento audaz que cautiva a través de referencias geográficas, experiencias culturales y muchas aventuras que, sin duda, confirman la creencia acerca de que la lectura es una actividad placentera que nos permite acumular conocimientos y desarrollar la imaginación.