Caminando entre las montañas

Caminando entre las montañas, respirando el aire puro de los arboles, solo con la naturaleza pensante, iluminado con el sol, es una travesía de placer, deleites verdes brillantes, dulce agua que brota de las rocas, vertiente negra de las montañas rocosas, emanando la sabiduría, es la que quiero, la que me enfoca.

Viendo la luz, conociendo mi ser, humildes ante tal belleza, como se iluminan los ojos de un niño cuando su madre lo mese, cuando se sabe que es el ambiente, puedes conocerte, porque si amas lo que te rodea lo demás se despierta y puedes ver mas allá de lo que caminan tus piernas.

Camino y camino, entro dentro de mí, en un silencio profundo, solo para saber quién soy, de donde vengo, porque existo, cuales son los porqués, porque tantos, solo el aire de las flores me dan las respuestas que consigo, porque buscando y buscando, nunca encontrare las paz, y dejando que llegue a mí, veré mi mayor felicidad.

Descalzo, entre los verdes pastos, sin darme cuenta que existe nada, sin saber si me lastimare o solo sangrare, me queda saber y deleitar lo que dios me dio,  porque el que no quiere ver, es el ciego de corazón.

Me encontré a mí mismo, a mi propio yo, diciéndome amigo aquí estoy, tu y yo somos uno, somos unión, carne y ser, pensamiento y sueños, hambre y desesperación, codicia y malicia, deseo y amor, calidad y poesía, porque caminando entre las montañas estoy, animando a mi alma a liberar su dolor, su clamor.

Me encontré, y ahora se quien soy, no veo más sino lo que me rodea, ahora soy feliz, gracias a mi naturaleza, por saber que quise decir, por escuchar mi voz, mi clamor, y mi dolor, caminando en la soledad de la lluvia, en la rudeza de la nobleza, en la paz y la guerra, la peor batalla que un ser enfrenta, es la que tiene con su propia cabeza.

Agradezco, deseo y añoro, que el señor de la alegría, bondad, tristeza, amor, codicia, emoción, calor, crueldad, belleza, lujuria y pasión, enfrento mis miedos a mi propio yo, ganando con mi espada, destrozando su corazón, liberando mi alma de dolor, para ser feliz ahora y siempre, entre todo, dentro de mi corazón porque caminando entre las montañas me encontré y ahora estoy vivo.