REGALO CON ALMA DE MUJER

A veces la vida te da regalos con alma de mujer.

No importa el tiempo que pueda disfrutar de tu compañía

porque quedará recogido en mi alma buscando eternidad.

Eres como un reflejo en un espejo que se puede atravesar

y detrás está un mundo donde la vida no pesa, es ingrávida,

está hecha de espíritus enamorados de amor a la vida.

Un mundo donde se puede andar sobre las aguas del mar.

Me imagino que cuando pisas el agua salta sobre mi cara

y cuando llega a mis labios noto su sabor con sorpresa,

la sal del mar se ha convertido en azúcar de hilos de algodón.

Mujer de espíritu de flores de fragancias inimaginables

que envuelven el corazón como coraza contra la tristeza

y sólo dejan pasar los sentimientos que llevan alegría.

Mis palabras podrían seguir uniéndose unas a otras

inagotables mientras no te saque de mi pensamiento,

pero quiero terminar con la idea principal de este poema:

A veces la vida me da regalos con alma de mujer.

FÉLIX