Y otra vez las gotas salpican
En la vereda donde estas sentada
Cuando la felicidad no te aplica
Grumosa niebla en la velada
Húmeda tez que va reflejando hastío
Un espasmo surge de lo más profundo
Te has dado cuenta de lo que has perdido
Las lágrimas se mezclan con el diluvio
En el soplar del viento pierdes la calma
No hay quien te anime, todos han partido
Antes tu vida envuelta en mansalva
Ahora la arropa un insistente frio
Dime ahora que la has perdido
Que se siente dominar tu vida
Sintiendo tan de cerca al peligro
Empezando a vivir de manera tardía
Y sigue la lluvia acompañando al duelo
En el funeral de los entes imaginarios
Calcinando las mentiras en el fuego
Mientras el dolor se vuelve ordinario
Cuando la vida perdió el misticismo
Al saber que todo acabará en el suelo
Arrojando los credos hacia el abismo
Te enteraste que el alma no alzará vuelo
Cuanto tiempo has desperdiciado
Empieza a rondarte la incesante pregunta
Solo una vida posee el ser mundano
No puedes permanecer, en la mentira, oculta
Somos existencias efímeras, no eternas
Y en la tierra acaba nuestra historia
Ya de fe no te queda ni una estela
No hay rastro de absolutos en tu memoria
Y no se detendrá este aguacero
Hasta que aceptes controlar tu vida
Ya ha desaparecido el titiritero
A la responsabilidad no le hallaras salida
Va naciendo la luna de acuario
Y con ella van muriendo las quimeras
Se va desvaneciendo el santuario
En el que expiabas todas tus penas
Noche solitaria con lluvia abundante
En la que se admiran pequeños retazos
De la sonrisa extinta en tu semblante
Al no encontrar acompañantes pasos
No hay más marcas en la arena
Que las dejadas por el caminante
Que recorre esta vida pasajera
Esperando algún día poder hallarse
Deja que la lluvia cese su brote
Deja de hacer que se parta el cielo
Haz que mañana se vuelva la noche
Termina, por fin, de hacer tu duelo
Abraza a la moral autodeterminada
Aquella que surge de la propia experiencia
No estás, del todo, desamparada
Todavía te acompaña tu conciencia
Y aunque es difícil sin entelequias
Vivir una vida que rauda se agota
Has que tu actuar sea una herencia
Para aquellos que, la tierra, rondan
Cuando se desvanezca tu esencia
Y a tu ser le llegue el último invierno
Quedará marcada tu bella presencia
En tu legado que se volverá eterno
Ya ha llegado la luna de acuario
Desplazando al cruel olvido
A todos los entes imaginarios
No te desvanezcas con ellos, te lo pido.
Andrés Ruiz H.
- Autor: rouz64251 ( Offline)
- Publicado: 3 de abril de 2011 a las 14:02
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 87
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