Con los ojos cerrados por momentos, y las manos apretadas hasta causarme dolor, contemplé tu agonía.Mi corazón estalló ante el silencio de tus labios, sentí las lágrimas quemándome por dentro...¡Eran lágrimas del alma!!.Cuando contemplé tu cuerpo flagelado cubierto de llagas, mi corazón buscó tu rostro deshecho por la maldad...pero allí mismo resplandecieron tus ojos y me cautivó tu mirada...el amor...el verdadero amor aún permanecía en ellos y se fijaron en mí.!!Yo, sin merecerlo permanecí junto a la cruz y comprendí que me ofrecías en tu entrega, la libertad y que tu muerte era para mí, la vida.La noche cubría el lugar, yo caminé como sin rumbo, elevé mi mirada al cielo y supe que te amaba como a nadie.Sonreí, la muerte no pudo contigo, las fuerzas del mal fueron vencidas, la luz prevaleció ante la oscuridad.Sonreí, aún había esperanza para la humanidad.Allí en el horizonte, con la luz de un nuevo día resplandeció tu victoria..y aquella tibia sangre derramada en el madero..nos dio, al fin...la libertad!!!
- Autor: nilda acosta ( Offline)
- Publicado: 11 de abril de 2011 a las 00:42
- Categoría: Religioso
- Lecturas: 81
Comentarios2
no lo sabrabn jamas...... nadie borara ese recuerdo gastado de tanto recordar.......
Me gusta tu poema, llena de imagenes bellas, tiene ritmo.
FELICIDADES.
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