¡No! no quiero entrar ahí... ¡no me obligues!
no ates mis manos, no vendes mis ojos.
Aprende de tacto, de cortejo,
no de violencia ni ensañamiento,
no de escarpado ni abrojo.
Pide generosidad, cortesía, hospitalidad,
¡misericordia!, si te la dan.
¡Pide versos! implora cantatas de amor,
tal vez alguien te las conceda; yo ya no.
Porque eres violento y la violencia llevas
repujada entre tus sucias venas,
¡y más y más engendras!
Maldigo este destino desatinado,
culpo a tus ojos faltos de honor,
¡esclavizaste mi existencia!
Desatino el mío, ese destino que nos unió...
Tenso mi ira.
Corto toda relación,
todo aliento, todo soplo...
todo átomo que tenga que ver contigo.
Fuiste a matarme,
mas no conseguiste rematarme.
En el infierno, así se pudra tu frustración.
Adiós no es suficiente despedida,
mas no encuentro la palabra adecuada
para decirte ¡sal de mi vida!,
porque, nunca naciste.
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Autor:
AdelaVila (
Offline) - Publicado: 4 de mayo de 2011 a las 03:13
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 199
- Usuarios favoritos de este poema: RilkeRainer
Offline)
Comentarios3
Me uno a ti contra la violencia de genero y ojala haya muchas voces gritando contra los malos tratos. Un abrazo
En ello estamos ¿verdad? Mil gracias y fuerte abrazo.
Adela
Lo principal es que la lucha contra la violencia, es de interes publico y social, por cada persona que se aleje de la violencia, sera gran aporte pera hacer una humanidad mejor (la lucha contra la violencia no reconoce; genero, edad, posicion economica, social, religion, etc)
recibe un saludo y un fuerte abrazo
Amigo, completamente de acuerdo contigo. Mil gracias, saludos y un fuerte abrazo.
Adela
La violencia siempre está mal...
SIEMPRE. Mil gracias Selenio, un fuerte abrazo.
Adela
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