Déjame presentarme,
¿Quién soy? No importa
¿Cómo soy? No importa
¿Cómo me llamo? No importa.
¿De donde vengo? No importa
¿Cuánto tengo? No importa.
Lo que entiendo hasta el día de hoy es:
Que me prestaron este cuerpo para trasladarme por el mundo.
Mi alma reciclada está aquí para aprender todos los días.
Vine a ayudar a otras almas, ser parte de su vida como complemento, como aderezo, como sal, nunca como limón.
Estoy aquí para aprender lo bueno y lo malo, a sufrir y reír.
Pusieron el amor en mi bolsa de viaje y me encomendaron repartirlo, no me lo puedo quedar porque me quema.
Me advirtieron que mi fe iba a flaquear, pero estoy aprendiendo a reestablecerla rápido.
Se que lo único que me puedo llevar de este mundo es la experiencia, así que tengo que vivir cada día, no sólo hacer acto de presencia.
Mi mayor ambición es capturar sonrisas, miradas e historias, porque de nadie aprendemos más que de otras historias, ya sean reales o de ficción.
Sólo existo cuando me dejas entrar en tu vida, cuando tomas de mí lo mejor, lo haces crecer y lo transmites.
Así que la próxima vez que me veas sonríeme y habré cumplido mi misión, habré existido.
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Autor:
ALFONSINA G. (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 2 de marzo de 2009 a las 19:53
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 1853
Offline)
Comentarios5
Es la dulce forma de repartir amor alrededor de ti...
Tendras lindas experiencias al hacerlo.
Muy Bello !
Felicidades
SÍ IMPORTA.
BESOS
Me gustó mucho. Es un poema metafísico y muy espiritual. Creo que te comprendo. Vives para dar y en la medida que das, recibes, pero también enseñas y aprendes. Eso debemos comprender todos los seres humanos.
Me gustó mucho este verso: "Que me prestaron este cuerpo para trasladarme por el mundo". Es que la verdad es que lo que vale de tí no es ese cuerpo, sino lo que está adentro, que es lo que realmente eres, lo que es eterno. Coincido contigo en que lo únivo que podemos llevar de este mundo es la experiencia. Y que ella nos hace más y mejores para cuando retornemos.
Muchas gracias por escribir este poema, Alfonsina.
Un abrazo.
Un final maravilloso en un paseo metafísico de tu alma;
"Estoy aqui para lo bueno y para lo malo... sonríeme y habré cumplido mi misión".
Me ha encantado leer tu manera suave en la fuerza de tus letras.
Un saludo
A lo mejor, aunque sin quererlo, fuiste también limón amargo. La belleza tiene algo de trágico imposible de evitar. Eso desde tiempos de Helena y más atrás. Pero cuando una belleza comulga belleza y deja, como una especie de invaluable mercancía, un poema. Entonces vale la pena, entonces "sí importa"
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