Se desliza para seducir,
sirve para lastimar ,
seudónimo de engaño,
y vehículo a la perdición.
vehículo usado por el engañador,
el maestro de la mentira,
el príncipe de las tinieblas,
el manipulador
decir , una mentira ,
implica continuar con otra,
y comienza el espiral del engaño,
y la manipulación
pecado abominable,
y que tenemos que quitar
de nuestros corazones
para no ser hacedores de pecado
mentiras piadosas, ?
un engaño mas del mentiroso mayor,
no es fácil escapar a las mentiras,
es una falsa salida al problema.
solo , no puedo ,
todo lo puedo en cristo
que me fortalece,
sin el, nada soy.
la mentira , la tenemos en nuestra vida diaria
peor aun, aveces dentro de nuestros corazones,
nos convertimos adicto a ellas,
la mentira es lo mas parecido a satanás,
decimos que amamos a dios ,
pero practicamos la mentira,
tenemos un hogar,
y lo llenamos de engaño,
hablo ahora a los hombres y las mujeres,
tiempos de angustia y clamor,
luchemos contra el peor de los pecados,
la mentira o engaño,es lo mismo.
lo primero?, ser honestos con nosotros mismo,
aparentamos lo que no somos,
a quien engañamos?...
solo a ti mismo...
comienza siendo honesto,
se el primero en tu hogar,
se el primero en tu trabajo
pero sobre todo se el primero con tigo mismo
seamos , luz de este mundo,
lleno de tinieblas,
de maldad,y traición ,
pero sobre todo de mentiras,
esforcémonos ,
y seamos valiente,
el bien triunfara sobre el mal,
la luz , sobre la tiniebla resplandece,
donde hay luz ,
no hay oscuridad,
donde nos levantemos,
habrá verdad...
Nota: dedicado a los hombres y mujeres que han luchado por la verdad ,
en especial a mi señor Jesucristo...
- Autor: the writter (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 31 de mayo de 2011 a las 02:17
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 133
Comentarios2
REAL Y PROFUNDO.TE ABRAZA, STELLA.
permíteme que te regale este poema que escribí hace tiempo, un abrazo
EL INSTANTE EN QUE NACE UNA MENTIRA
Hallábase el mar en temerosa calma,
las campanas del viento, temblorosas,
resonaban a lo lejos como un lamento;
ni una gaviota surcaba el azul del cielo.
Tiñéronse de gris todos los campos
y ni una flor abrió los ojos de sus pétalos.
Los ríos escondieron sus aguas
bajo túneles de agazapadas madreselvas.
Los volcanes sí, ellos eran felices
y desprendían una lava verde
y viscosa para celebrarlo:
Había nacido otra MENTIRA
Las lágrimas volvieron a brotar
en los ojos de Dios.
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