No desabotones mi blusa,
Deja tus manos quietas
Aun no lo he decidido, quizás corra
Para no cargar mí conciencia
Y miro mí alrededor
Preguntándome que hago aquí,
Si no fuera por esta pasión loca
Que me ha arrastrado hacia ti.
Déjame solo un momento
Que mis ideas aclare,
Creo que estoy traicionando,
Que hago todo lo opuesto.
Pero te miro y se
Que no habrá otro momento,
Que mi cuerpo se deleite
Con tu piel y tus besos.
Que es difícil no pecar
Pero más difícil es no probar,
Esa miel que te tienta
Y te envuelve a tomar.
Que pasara después,
Que nuestros cuerpos despierten
Del éxtasis vivido,
Te pediré nuevamente a que
Me busques para encarcelarme
En tu cuerpo libido.
- Autor: Pilar Reyes (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 3 de junio de 2011 a las 00:17
- Comentario del autor sobre el poema: Este poema lo vuelvo a publicar, estoy trizte y mi mano se niega a tomar mi lapiz,solo quiero recordar el comienzo de este sufrimiento que quizas pude haber evitado, pero aun tengo el sabor de tu miel en mis labios.
- Categoría: Amor
- Lecturas: 79
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