Debajo de esa rosa
de mis párpados
tengo el corazón enfermo.
¿¡Dios, qué suena!?
Debajo de esa rosa
de mi ventana
duerme mi amor malvado.
Soñando con tus manos.
Debajo de esa rosa
de sangre
permanece la sombra.
Y no puede morir.
Debajo de esa rosa
de mis párpados
tengo el corazón enfermo.
¿¡Dios, qué suena!?
Debajo de esa rosa
de mi ventana
duerme mi amor malvado.
Soñando con tus manos.
Debajo de esa rosa
de sangre
permanece la sombra.
Y no puede morir.
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