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Yehosua
Erase aquel hombre de apariencia divina
de rostro venerable y viril madurez,
de ojos enigmáticos, azules como el cielo
de arqueadas cejas negras y de trigueña tez.
Su cabello ondulado caía sobre sus hombros
y se meneaba al viento como el trigo en los campos,
su barba espesa y clara contorneaba su rostro
como la flor silvestre la plenitud de los prados.
Su cabeza inclinada en humilde reverencia
destacaba las líneas de su nariz y labios;
de formas tan perfectas y de tal simetría,
que ninguno de los ángeles pudieran imitarlo.
Su mirada era profunda, apacible, serena,
como el sol de la tarde cuando esparce sus rayos,
y con un marcado gesto de honda melancolía,
su presencia inocente inspiraba a escucharlo.
Y comenzaba su prédica de paz y armonía
con voz acompasada y extendiendo los brazos;
su mensaje elocuente de palabras sencillas
encendía la esperanza de aquel pueblo olvidado…
Aún con la evidencia de todos sus milagros,
su gran sabiduría y resplandor de luz,
escapó a la comprensión de cuantos le escucharon
y fue crucificado, muriendo en una cruz.
Mas fue su infame muerte cumplir las profecías
y su triunfo más grande, el de la resurrección;
entonces comprendieron quien era aquel raboni
que padeció ;a muerte por un pacto de amor.
Rafael
- Autor: Umskua (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de agosto de 2009 a las 14:51
- Comentario del autor sobre el poema: Busqué todas las descripciones posibles del retrato de Jesús. Entre ellas esta: Retrato de Jesús Un hombre de gran virtud ha aparecido en nuestro tiempo, que lleva por nombre Jesús, el Cristo; el cual resucita a los muertos, y cura toda suerte de enfermedades. Llámanle Profeta de la verdad, y tiene discípulos que afirman que es el Hijo de Dios. No hay duda de que es un hombre hermoso y digno de admiración; tiene un rostro venerable que inspira al mismo tiempo amor y temor en cuantos lo contemplan. Sus cabellos son largos y rubios y caen unidos hasta las orejas, formando luego rizos y bucles graciosos, se desparraman sobre sus espaldas; dicha cabellera se ve partida en dos en lo alto de la cabeza, a la usanza de los nazarenos. Su faz, limpia de manchas y arrugas, es de tono encendido, pero agradable; su nariz y boca correctas. Tiene ojos azules y en ellos se encienden llamas de diversa luz. Lleva barba espesa pero no muy larga, del mismo color de los cabellos y, como ellos, partida también por el medio; sus brazos y manos son también una delicia. Es terrible en el exhortar y reprender; benigno y amable; alegre pero grave; nadie lo vio reír, pero sí algunas veces llorar; es parco, modesto y convincente en el hablar; es hermoso entre los hijos de los hombres. Descripción impresionante que de Jesús hizo Plubio Lentulo, procónsul romano, contemporáneo de Cristo, presunto antecesor de Pilato en Judea, en una carta dirigida a Tiberio y al Senado Romano.
- Categoría: Religioso
- Lecturas: 81
- Usuarios favoritos de este poema: Lluvia Tropical
Comentarios4
me gusto muchisimo....(A)
Hermoso poema...
Muy buen poema, felicitaciones.
Un abrazo
Ruben.
Interesante tu escrito de carácter espiritual . te has preocupado en investigar.
!Enhorabuena!
Lluvia Tropical
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