Espuela para el valiente
tienen que ser los cobardes,
que abusan haciendo alardes
del ser débil e inocente
asiendo esencia indolente,
que mata y nada comprende
porque a su deidad atiende,
y encubre aquellas miserias
que le constriñen arterias
antes que ceder al duende.
Hay duende en el ser cual crea;
y la perdición que anega
cubre mientras se reniega
de la bondad como tea
y se maltrata la brea;
pues necesaria es la lumbre
si en noche -y hasta la cumbre-
le honrara subir al hombre
queriendo eludir pronombre,
peso de ego con herrumbre.
Un valiente da la cara
y un cobarde le golpea
esperando no le vea
y al suplicio condenara
la justicia con su vara.
Pues el hombre no es valiente
cuando pierde el ser clemente
y acogiendo el acto cruel
olvida aquel arancel
que pagara amargamente.
Es cobarde el que forzara
al valiente al infortunio
e invocase un plenilunio,
para en lobo se tomara
el cordero, y mancillara
la serenidad latente,
-cual vigila el continente-
que rechaza ofensa vana,
y aún pareciendo espartana
es variedad consistente.
318-omu G.S. (bcn-2011)
- Autor: omu (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 7 de septiembre de 2011 a las 10:09
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 1407
Comentarios2
mucho juicio y una verdad certera: la de tu firme puño...
Un valiente da la cara
y un cobarde le golpea
esperando no le vea
y al suplicio condenara
la justicia con su vara.
Pues el hombre no es valiente
cuando pierde el ser clemente
y acogiendo el acto cruel
olvida aquel arancel
que pagara amargamente.
Son dos cars de una moneda. pero que siempre enseña una sola cara, la del valiente.
besos.
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