La almohada me acompaña
en la noche oscura de mi alma.
Quisiera tener alas
para volar y respirar la libertad
del agua chocando en mi cara.
Naugrafar en una isla
donde solo exita la calma.
Sentir la compañia de tu presencia
donde quiera que valla.
Porque se que en la tormenta mas negra
eres tu mi lumbrera.
Mi alma se impacienta
y mis deseos se aceleran.
Mas se que en esta espera estas
preparando una gran recompensa.
Perdona mi ansiedad
y ayudame a esperar.
Enseñame y hazme entender
que todo obra para bien.
Escapar a tus pies
es la unica libertad
que me hara bien.
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Autor:
Yaritza Torres (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de septiembre de 2011 a las 07:40
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 96
Offline)
Comentarios2
La impaciencia suele ser una compañera a la que debemos vigilar con mucha cautela.
Bendiciones
Ese último verso "Escapar a tus pies es la única libertad que me hará bien" me fascinó. Te lo digo yo que la ansiedad nos nubla la razón. Es com una neblina obscura que se pega a nuestro rostro y no nos deja ver el sol que brilla mas allá. Usted mejor que nadie sabe que "cuando el queda en silencio es por que está trabajndo". Es normal sentir deseperanza en ciertos momentos pero te aseguro que todo pasa. Te amo!
Asi mismo amiguita... esperare pacientemente aunque la duda me atormente yo no confio con la mente lo hago con el corazon...esperare en la tormenta aunque tardare su respuesta yo confiare en su providencia el siempre tiene el control... Te amo!!! xoxo
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