UN DÍA COMO AYER

Solía ser yo en las tardes,
y volver por ti una mañana,

Solía viajar al amor puro
hecho de instantes,

solía jugar a ser adolescente
y a escribir versos
tal vez desatinados
o poco cuerdos...

en un cierto jirón inacabable
se plasman pequeñas grietas de olvido,
y recorren como vendavales de invierno,
alcanzándome y dejándome ir,
o echándome a caminar lento
con mis palabras,
con mi castigo...

solía recordar el olor a silencio,
con algunos latidos suaves
con algunas hojas de cuaderno
pintándose de viejo
cada vez mas fuerte con los años
en algún rincón de la noche,

en esta contienda breve,
o tramo de lo mas voluble,
la vida se hace pausada,
a veces triste,
e irremediablemente
fantasiosa...

Un día como ayer
se pudo soportar al os abismos,
a los espacios sin formas,
 a los misterios inacabables,
a las lecturas adictas al vacio,
ahora yacen como secretos,
dejándose herir por el tiempo...