¿Por qué la vida pasa, Señor
¿Por qué el tiempo se termina ?
¿Por qué se termina, el aliento, tan pronto?
¿Por qué, Señor, Por que?
¿Si la vida que imagino, no la he podido vivir?
¿Si el camino de los años de mi vida, no los he podido recorrer?
¿Si el cielo no he podido ver?
¿Por qué Señor, Por que?
¿Por que el aliento de mi madre no he sentido?
¿Por que las manos de mi padre no he tocado?
¿Por que las risas de mis hermanas no he escuchado?
¿Por que Señor, por que?
Es mucho, lo que quiero vivir
Y tan poco, lo que puedo resistir
El aliento de vida me falta
¿Por qué Señor, Por que?
En el vientre de mi madre morire
yo lo se
La vida no viviré
A mi familia nunca conoceré
Los ojos nunca abriré
Ni reiré, ni llorare, ni tampoco cantare
Nunca saltare, nunca jugare
¿Por qué Señor, por que?
La vida, no es para mi
Eso lo puedo sentir
Pero Señor, en mi muerte
Un deseo te quiero pedir
Déjame ver a mi madre, antes de partir
No importa que ella crea que estoy muerta
No importa, que nunca mas la vuelva a ver
Déjame tan solo un minuto, su cara recorrer
Con eso, ya nunca te preguntare
¿Por qué Señor, Por que?
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Autor:
jorgesalinas (
Offline) - Publicado: 23 de septiembre de 2011 a las 18:47
- Comentario del autor sobre el poema: Una hermana mía, iba a tener su tercer hija, ya tenia 2 hijas y la que estaba por nacer también iba a ser niña, En el hospital todo fue muy bien hasta después que nació la niña, ya que mi hermana se despertó le dijeron los doctores que la niña se había asfixiado, por que se le enredó el cordón umbilical en el cuello, y debido a esto había fallecido, tras lo cual mi hermana pidió ver por un momento a su hija, la cual aunque estaba fallecida le fue llevada a su cama y así se pudo despedir de ella, cuando yo me entere de este drama, me pareció injusto que una niña que no pudo ni siquiera haber cometido un pecado, pues murió en el ultimo momento del parto, no haya podido vivir, ¿Qué pecado pudo haber cometido si todavía ni había nacido?, entendí que este era uno de los secretos de Dios, los cuales difícilmente podremos entender, y también entendí que no me correspondía a mi tratar de entender este misterio, sino que en todo caso debía ser la niña fallecida, la que debía platicar con Dios sobre este asunto, así escribí ¿Por qué Señor, Por que?.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 518
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