Todo es efimero a la luz
del verdadero olvido,
prefiero olvidar falsamente
algo que en mi sustenta sorisas.
Nada es audible ahora en este
llanto tartamudo,
nada me apetece a la hora de soñar,
mi hambre de la nada se alimenta.
Ahora aquel hombre que en el
anhelo volaba,
cojea en aquella montaña
desvanesida, perdida,
voluble, infinita en el adios.
- Autor: tiburcio de la sonec ( Offline)
- Publicado: 26 de septiembre de 2011 a las 02:01
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 43
Comentarios1
que metáfora audaz para expresar un despecho
Es algo singular que alguien comprenda lo que escribo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.