Demoro el momento de rendirme
mansamente navego en subterfugios
remoloneo diestramente a destiempo
y sopeso el instante de perderme
a regañadientes
luego simplemente me deslizo
por la pendiente del ocaso
temblando febril y sincopadamente
claudico
y olvidada de mi misma
ya solo temo no encontrarte
- Autor: quimera (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de octubre de 2011 a las 21:06
- Categoría: Amor
- Lecturas: 97
- Usuarios favoritos de este poema: Guillermo Sánchez, Jef, ADOLFO CESAR MARCELLO
Comentarios4
Me gustó muchísimo. De lo mejor que he leído por estos rumbos...o ¿lo mejor?
Saludos 🙂
Gracias! (estoy abrumada)
Hehe, un gusto :), pero ¿por qué abrumada?
tu comentario ha sido tan extraordinariamente generoso que me ha dejado un pelin abrumada (y encantada todo hay que decirlo)
navegué en tu mar...
casi naufrago en el tuyo...
cerca estaba la isla!
Muy bueno!
Escribes genial!
Lo mismo digo! Muchas gracias! Un abrazo
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