Entre las brisas de invierno se escucha un tenue musitar
El sol se encuentra más distante que nunca, oculto frente a sus ojos, y la piel que pide su calor
Dos personas duermen bajo un árbol helado, espalda a espalda, distintas direcciones llevan tatuadas en sus almas
Bajo un cielo inmenso, son solo dos personas anhelando una intima fantasía
Las hojas caen y entre su baile de gravedad al suelo, dibujan sus sentimientos callados
Al caer, suave murmullo del latir de un corazón, que desconoce su futuro…
Comienza una historia de aquellas que deben no ser mencionadas
Una canción a lo lejano suena, siempre en la misma dirección, siempre acompañada con un agrio aroma a desolación…
A lo lejos se puede deslumbrar un lago… en él, reflejos de viejos recuerdos llevados al presente
Cuando eran jóvenes se confesaron su amor, se dijeron que se amaban más allá de cualquier realidad
Ignorantes y felices de la mano pasaron juntos los años
Mas la duda, la sátira en sus corazones siempre supo lo que realmente pasaría
Parecería una cruel broma, cosas del destino, misma sensación como la primera vez que se conoce el aire caliente entrando por sus pulmones al nacer
Mismo sentimiento que le hace preguntarse todas las noches antes de dormir
¿Podre despertar y esperar escuchar tu voz entre el cantar de las aves del parque?
A veces se encuentran pensando en aquel viejo recuerdo, grabado con tal excitación sobre el tronco del árbol que siempre frecuentaron
En ellas las iníciales de un amor, de sus corazones hicieron palabras cinceladas con eterna pasión
Deseos íntimos que deben permanecer en prohibido silencio
Deseos que desnudaron sus corazones y cuerpos ante sus inquietas miradas
Y en aquel latir armonioso y en compas de las hojas cayendo
Recuerdo…
Si… son solo recuerdos…
- Autor: Job Rodríguez (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 20 de octubre de 2011 a las 00:02
- Comentario del autor sobre el poema: Recuerdos, más una fria noche, siempre terminan en un fulgor de inspiración.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 158
Comentarios2
esa nostalgia queda en el lugar, queda entre esos árboles; las dos sombras, quedan maquinadas en el tiempo, dormidas, hasta cuando encuentres de nuevo al amor perdido...
Buena prosa...
¿El amor se puede perder?
-perdón por la intromisión-
jajaja... ya decía este poema no es tuyo.. el amor queda sepultada en una esencia...
¿Como en la historia del asesino? -ese que fabricó el perfume-
algo así, pero ese sujeto quería ser el Dios de las esencias, tenía una idea maquiavelista de lograr ese objetivo, y también era o es un ser egocéntrico...
A veces las lágrimas nos caen como recuerdos, esas tibias gotas que congelan el alma.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.