Me voy, como se van las flores cuando mueren
o como el árbol, aquel que plantamos
hace quinientos años.
Me marcho, porque las nubes
ya no me rozan cuando pasan
y el ayer o el mañana son tiempos difusos,
porque el atardecer se rompió dentro de mi.
Me deshago, como una vez lo hicieron
los hielos del planeta,
siento que poco a poco, mi mundo desvanece.
Cuando regrese, sin saber quien fui,
ni dónde se instalaron mis arcángeles,
tal vez encuentre la tierra prometida,
para entonces no se si habrá flores
o si el árbol aquel, levantará su copa
para alcanzar el infinito.
Entonces empezaré de nuevo
a marcharme lentamente,
rehaciendo el tiempo.
- Autor: Tula (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 4 de noviembre de 2011 a las 15:22
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 72
Comentarios2
Hermosa melodía de un sin fin de sensaciones dejando el tiempo que trabaje para curar los males seguir yendo y viniendo en un mundo de autoanalices del ser individual con el ser supremo en la forma de acción y reacción en efectos de bondades y maldades todo tiene un cambio y siempre el cambio es interno y eterno
Con mi cariño Linda
El ritmo del poema atrapa a su lector... que tal escucharlo en la voz de quien lo hizo....
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