Sentado en el asiento del vacío
me inclino a pensar en el espacio,
a lo lejos señales prenden y apagan
como señalando un camino profundo,
un manto cubre la luna
bellamente vestida de seda,
la tristeza que se postra al cielo
la melancolía brilla y apaga con recelo,
hay asientos para recordar,
con la luna el tiempo vuela
y se despide a otra mañana…
Antes solía seguir a la luna
como un tesoro perdido,
a veces ella también me buscaba
como unidos de la espalda,
yo me arropaba con el telar oscuro de la noche
más claro que la soledad,
mas frio que la soledad…
Ahora platico con la cobija de la noche,
la luna es la linterna que ayuda a mirar
cocuyos como una corona hacen soñar,
el viento le da razón al frio
y a la mesa de noche que cuida de mi sueño…
Ciertamente cuando miro la luna tu estás
sé que desde donde me siento no hay lugar,
pronto me dejará por el león,
como a quien lo abandona un barco,
y mi asiento es lugar de espera,
oh melancolía! El barco te da razón…
- Autor: amnesiacdaniel (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 15 de noviembre de 2011 a las 11:21
- Categoría: Triste
- Lecturas: 61
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