Quería ser lo que no soy, soy lo que no quería, inconstancia que me da el no poder hacer lo que gustaría de mí vida.
Presa al destino, que vino conmigo al nascer, se que a los otros le gusta mí manera de ser, a mí no.
Sufro en demasía, con tanta falta de comprensión, con el egoísmo, con desinterés por mí, por lo que tengo necesidad, poco pido, mismo ese poco no me dan, parezco un monedero ambulante, que solo sirve para pagar los gastos de todos. Lástima que no piensen en la parte moral, que no recuerden que tengo sentimientos, que soy un ser humano, lo único interés que tengo para algunos es mí dinero.
Nunca hice caso a la parte monetaria, lo que tenia era de todos, he dejado de comprar para mí para hacerlo con ellos, siempre a eses algunos, le he dado todo, con gusto y satisfacción, hoy no tengo recompensa alguna de los sacrificios de una vida entera.
Si hay un día de alegría y satisfacción, hay otro de tristeza, siempre así fue.
Pregunto, porqué? Es como estuviera en una habitación sin puerta, solo con una ventana por donde entra el sol, pero sé que si salgo por ella me lastimo, es muy alta y no se volar.
Así me siento, presa con rejillas doradas, pero frías, sin vida, antes fueran de papel viejo, sin valor, que seguro las rompería y cogería alas para volar por la ventana en busca de mis sueños y de lo que quería ser.
Vida, que hiciste tu de mí, porque me haces sufrir así si tu eres mi madre?
Carminha Nieves
- Autor: secreet50 (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 30 de noviembre de 2011 a las 08:32
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 51
Comentarios1
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