Mire, tus ojos profundos y en calma.
fría calma, que me erizaba por dentro.
tu boca cerrada no emitía sonido alguno.
mutismo total mas, en tu mirada.....
adivinar, quería que gritaras.
mi alma en vilo así, esperaba.
Dime algo, amore mio.
no calles por Dios habla ahora.
mas, tu silencio sepulcral era mi castigo.
a mi tormento, de amarte tanto.
tus manos fuertes, varoniles
me asieron por la cintura.
mordiéndome los labios hechos sangre
supe, de tu desventura.
preso estabas del amor mio
y yo cautiva de tus ojos pasión de sueños.
Autor
Martha Lucia Jimenez.
D.R
-
Autor:
Martha Lucia Jimenez (
Offline) - Publicado: 7 de diciembre de 2011 a las 18:52
- Categoría: Amor
- Lecturas: 33
Offline)
Comentarios2
no calles por Dios habla ahora.
mas, tu silencio sepulcral era mi castigo.
a mi tormento, de amarte tanto.
fuertes emociones...
Gracias por pasar
tu comentario encierra todo
el amor. Lo mas bello.
con cariño
Martha.
"tus manos fuertes, varoniles
me asieron por la cintura.
mordiéndome los labios hechos sangre
supe, de tu desventura.
preso estabas del amor mio
y yo cautiva de tus ojos pasión de sueños."Poetisa Martha,amiga,versos de un gran amor que se lleva en el corazón,acompañados del silencio,desventura de la persona amada.Muchas bendiciones.
Gracias poeta
eres muy amable. Y si, el amor lo mas grande
como tesoro en el corazón guardado.
bendiciones plenas sean en tu sendero.
cariños
Martha
Amén. Así es el amor,un tesoro que es gratis porque no hay que comprarlo.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.