A veces quiero reír
cuando mi pecho necesita llorar.
Llorar todo el dolor que hay en mí
desde el día en que tú ya no estás.
A veces yo lamento sentir
todo el amor que no puedo entregar
pero yo no me niego a ser feliz
si aún te amo con total libertad.
A veces sólo quiero morir
porque sé que ya no volverás.
No me importa el pasado o el porvenir
si el presente no lo puedo cambiar.
A veces uno aprende a vivir
con más sueños de los que puede contar
y a vivir con la suerte de poder sonreír
y con este consuelo de poder aún llorar.
- Autor: Rosa Mejía (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de enero de 2012 a las 16:40
- Categoría: Amor
- Lecturas: 386
- Usuarios favoritos de este poema: இஆ» eL Chico D las PoesíaZ «ஆஇ
Comentarios5
las lagrimas arrastran el dolor
la risa ensancha el alma
un abrazo
Las rimas alternadas!!... WOW!!...
Mi bella amiga son tus letras muy buenas y pues... con ese estilo y carisma al redactar estoy seguro que te dejarás notar en el portal...
Muy bellas letras!!
Un abrazo fraternal!!
Te deseo los mejores éxitos!!
La frase del día:
"Lo que no comprendemos no lo poseemos."
— Johann W. Goethe
//*C.B.P*\
cuando la espera es inútil, hay que desistir de ella
y albergar sin demora, el nuevo sustituto que llega.
El corazón sabe que ha de reunir fuerzas para sobrevivir, para no marchitarse en la espera de un amor que jamás volverá. Ahora es el momento de latir con ímpetu, es el momento de bombear cariño, amor y amistad.
Un saludo grande Jota Jota.
Gracias por tus generosos deseos.
me encanta tu estado de animo así hablan los triunfadores,
hay que colocarle mas potencia a ese corazon para que esparza lo que el mundo necesita. amor. amor y mas amor.
Los sentimientos son como agua! y nuestro cuerpo su caudal...
Deja que fluya! ya sea riendo, besando, llorando o al suspirar...
si el agua no sale, se estanca, se pudre...
buen poema(Y)
Date permiso de sentirte mal.
A pesar de todo creo que hay más que dolor en un duelo.
Existe por ejemplo el coraje de llegar adonde nunca llegaste.
Y en el acto de dejar atrás hay algo de salir al encuentro.
Y cada adiós oculta silencioso un bienvenido.
La existencia es tan sólo una mezcla extraña
de finales y principios.
Y las despedidas mucho más
un tema de la vida que de la muerte.
Y lo creo porque otros que vivieron lo contaron,
porque otros que sufrieron primero
crecieron después del dolor.
Es por eso que sé que no estoy sola,
que avanzo día y noche acompañada.
Que hay otros que dejando su marca en el camino
encontraron más tarde...caminando,
el sentido verdadero de haberlo recorrido.
No todo es dolor: Marta Bujó
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