Todo ha comenzado por aquella solitaria palabra
Que lamentablemente, triste y sigilosa llego a ti,
Se hundió en tu mente como en agua una piedra,
No tenia sentido, ni siquiera sugería algo de mí.
No significaba nada porque no la dije,
Más tú la tomaste, querías escucharla en el silencio,
Era sin sentido ni lógica, así, como un alebrije,
Sin acción ni oposición, me sentencio.
Desde entonces observo de noche el cielo,
Por las auroras, aves emprendiendo el vuelo,
Como con esperanza de alcanzar mi anhelo,
No pasa nada, siguen corriendo las horas.
Mis ojos a los tuyos y estos a los míos
Siguen preguntando que fue aquello,
Como esperando respuesta de mis labios
Solo desenlazo las miradas y giro mi cuello.
3D3
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Autor:
Kaffa (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 14 de septiembre de 2009 a las 22:44
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 140
- Usuarios favoritos de este poema: BryanGomez
Offline)
Comentarios4
Me encanto!!, felicidades!
Wow, amigo, que buen poema, te relicito, me gusto.
Una silenciosa palabra, nunca dicha, pero que mal causo.
Ha sido un placer leerte.
Saludos y un abrazototote.
besos y que estes muy bien. cuidate
Deja un sabor triste..es el desencuentro, quizas no era la palabra en si sino la intencion puesta en ella -o imaginada-. Son fragiles los corazones cuando se aman, susceptibles a herirse sin darnos casi cuenta. Me gusta tu poesia, toma una vivencia, un momento de dos y lo reproduce con sentimiento y claridad.
Hermosa poesía
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