Itinerante e indignado
seguirás estando,
con esa mirada sideral
que aunque irradies felicidad,
sigues amando oculto.
Fuerte, si fuerte,
porque te hace vibrar
los cimientos,
sin cambiar tu cordura, ni misión.
Nadie puede olvidar
tu loca sonrisa,
tus ojos brillantes,
el vértigo al escuchar su voz,
y el excitable corazón
cuando disimuladamente
observas su abultado abdomen,
y acaricias con tu mirada su tersa y morena tez.
Esparces placidez,
amas en silencio,
en hora buena
todo te molesta, todo te disgusta,
hay un vendaval misántropo
que te hace callar.
No olvidamos el sol de tu rostro,
la nostalgia,
el corazón aprisionado,
tus abrumadores recuerdos,
la mirada por la ventana,
y tú destino incierto.
Y sobretodo……. tu timidez.
- Autor: orlandor ( Offline)
- Publicado: 24 de enero de 2012 a las 12:31
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 85
- Usuarios favoritos de este poema: ☼ G U E R R E R O ☼
Comentarios2
bueno, creo que la timidez es algo por lo que la mayoría pasamos
quizá por que nos falta confianza
Nadie puede olvidar
tu loca sonrisa,
tus ojos brillantes,
el vértigo al escuchar su voz,
y el excitable corazón
cuando disimuladamente
observas su abultado abdomen,
y acaricias con tu mirada su tersa y morena tez.
esta parte me parecio sublime con tinta del corazon y sabiduria, buen poema amigo.
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