Faz sensible, de sonrisa delicada,
Tú con tus señas encantadoras
Has sabido imponerte arrolladora,
Y curar con bálsamos mi alma lacerada.
¡Ah! Ojalá supieras que existo,
Y con febril pasión te adoro;
¿Cuánto fuego más debo dar arrojo
Para que, por ti, pueda ser visto?
Belleza sin parangón, gran hechicera,
Cuyo cuerpo bailotea al viento,
Con esos ojos y movimientos lentos
Que me devuelven a mis primaveras;
¡Pero no conoces mi ser!
Dolor me abruma, tristeza impera,
Y tú, con tus agasajos de fiera
A mí no me puedes ni ver.
Sin embargo eres mi faz añorada,
Dama dulce y por mí querida,
Caminas y brota tierra florecida
Pues tu faz, faro, anda iluminada.
- Autor: fabrizzio_baudelaire ( Offline)
- Publicado: 14 de febrero de 2012 a las 15:27
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 95
Comentarios2
Es precioso! Me encantó.
Un abrazo.
Muchas gracias por tus afables palabras.
Un saludo y un fuerte abrazo!!
Letras cargas de pasión y sentimientos.
Un placer leerte, saludos.
Gracias por comentar y por la franqueza.
Un saludo afectuoso!
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