Muero por de nuevo tu ósculo en mis labios tener y tu ahora ausente pasión, astro vespertino, que ahora es oculto una vez más poseer. Muero por de nuevo llegar a tu simiente reposa y más adentro, a donde tu esperanza se yergue tu esperanza. Muero por tomar tu mano y ponerla en mi corazón en mi flameante mano que al alba aun es débil.
Robémosle al sol de su fe para levantarse cada día sin importar nada, pidámosle a la luna la prudencia que ostenta al no mostrarse siempre igual, seamos realistas no miremos atrás.
- Autor: Jack (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de marzo de 2012 a las 23:12
- Categoría: Triste
- Lecturas: 41
- Usuarios favoritos de este poema: Jose Monnin elpoeta
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.